Vemos aquí a la manada de Sangre de Lobo en una de las ocasiones que se reunen todos sus miembros. Tras una rápida adaptación y reconocimiento de sus respectivos roles, cada individuo encuentra su lugar en la jerarquía y con ello llega el equilibrio y la armonía: cada uno encuentra su sitio.

En esta manada, formada por 4 perros lobos checoslovacos (dos machos y dos hembras) y un mestizo de boxer, se distingue con nitidez al macho dominante en el escalafón más alto de la jerarquía: es Esuna Arison Srdcervác (4,5 años). Observando su comportamiento, se aprecian claramente ciertos errores en las conclusiones de las antiguas corrientes tradicionales de los primeros estudios de manadas de lobos en cautividad como, por ejemplo, citando al etólogo español Antonio Pozuelos, "el mando absoluto lo ostenta un macho que normalmente es el que más batallas ha librado y mejores resultados ha obtenido”.

En Aris se aprecia que la dominación la ejerce sin necesidad de demostrar su fuerza y afianza su liderazgo encaminando sus acciones a intentar evitar, dentro de la manada, cualquier tipo de enfrentamiento o conflicto entre sus miembros, cortándolo de raíz. Además, son precisamente los miembros de la manada los que adoptan voluntariamente posturas sumisas ante él, así que parte también de ellos el delegar en Aris el liderazgo del grupo.

Esto concuerda más con etólogos o conductistas como la Doctora Myrna Milani (opina que en la naturaleza aquellos individuos que intentaran ejercer la dominancia mediante la fuerza tendrían menos oportunidades de prosperar, ya que ese gasto de energía continuado y heridas o lesiones producidas podrían llevarlos a una muerte prematura).

L. David Mech (que estudió a los lobos en libertad de la isla de Ellesmere en Canadá durante los veranos de 1968 a 1998) en sus estudios, frente la tradicional versión rígida de la jerarquía (alfas, betas, omegas) surgida de observar durante cortos períodos de tiempo a manadas en cautividad, Mech aporta el concepto de que las manadas en libertad están lideradas por una pareja reproductora que convive con sus descendientes. Podemos observar como Aldaron Sangre de Lobo (9 meses), hijo de Aris, asume su rol sumiso frente a su padre, además de que Zarina del Castillo de Sax (3,5 años) como madre y como hembra de más edad, ejerce su dominancia clara sobre su hijo pero también sobre Elsa Elentári Šedý poklad (16 meses), la otra hembra joven de la manada. Además, en ausencia de Aris, Zarina es la que ejerce como individuo dominante de la mananda.

Mientras escribimos esta entrada en el blog, ya han pasado unos seis o siete meses después del video aquí mostrado, esto ha significado sobre todo que Elsa y Aldaron han madurado y, respeto al video, de Elsa cabe destacar el rol sumiso que asume bajo Aris y Zarina, pero que con claridad se impone por encima de Aldaron y Tiger (sobre todo corrigiendo claramente a Aldaron en sus efusivos arranques adolescentes de energía o a Tiger cuando intenta proteger con demasiada intensidad a un recurso), pero predominando mucho más su carácter pacificador entre los miembros de la manada, siendo muy importante el trabajo que hace con su papel pacificador. Siempre está atenta a anticiparse a los posibles conflictos y a tranquilizar a cualquiera de los miembros que pueda estar en ellos (pero, sobre todo, Elsa está pendiente de todas las expresiones corporales y gestos de Zarina, para tranquilizarla y asegurarse de que la propia Elsa no vaya a realizar ningún comportamiento que pueda ser interpretado como una muestra de desafío para la hembra dominante).

Se pierde la noción del tiempo viendo cómo se relacionan entre ellos, cómo constantemente con sus gestos, expresiones, juegos o incluso trabajando en equipo (uniendo fuerzas para "cazar" o para defender el territorio) afianzan sus posiciones o roles... es fascinante ver que la manada de Sangre de Lobo es un grupo social que ha encontrado su equilibrio... y también es una satisfacción ser los miembros "humanos" de la manada y estar tan cerca de todos ellos. Aunque se sobreentiende, para llegar a este punto de convivencia, obviamente también hemos ayudado a suavizar asperezas y a corregir comportamientos no deseados (por ejemplo, en momentos de celo con las hembras, hay que estar vigilantes).

Seguiremos disfrutando día a día de la suerte que tenemos de convivir con nuestra manada como nuestra propia familia...

...cada momento que pasamos con ellos es un verdadero regalo.

Sangre de Lobo Kennel - Cria y Selección de Perro Lobo Checoslovaco

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